A día de hoy y gracias a mis amistades, familiares, de las personas que me quieren y de las señales que van llegando de la vida misma, pude frenar mi anhelo, mi afán de que todo podía hacerlo “YO” sólito sin la ayuda de nadie.
A día de hoy, NO me da miedo transmitir lo que siento. Por muy buenas o muy malas que puedan ser mis emociones e sensaciones. Sigo siendo un ser humano.
Si. Cometí un error al machacarme, al machacar a los demás, al considerarme mejor que los demás, sin necesitar a nadie e alimentando involuntariamente y de manera contraproducente mi ego y mi orgullo. (Señal evidente de falta de seguridad en si mismo). Cosa que, mis primeras puntadas en el pecho aparecieron al trabajar mas horas, mas enchufado que nunca para salir adelante. Sin darme cuenta que me estaba metiendo en un circulo vicioso. El no querer ver a nadie, el creer no poder salir por problemas económicos pero eso si, con la motivación intacta inclusive “in crescendo”, me metí en un engranaje peligroso e dañino donde solo el éxito profesional me nutria y mas ahora, con una empresa de joven creación. Con la firme convicción e alimentada esta por la falsa creencia de que no se necesita a nadie para lograr el éxito, que todo depende de mi para así cumplir con los sueños preestablecidos.
Después de esa “iluminación”; llamemos lo clarividencia, que aparece de repente, como por arte de magia, doy las gracias a la vida por haber tenido esa curiosidad, esa paciencia en haber estudiado y puesta en practica durante todos estos años estas enseñanzas que a día de hoy, quiero transmitir a los profesionales para que sean un poquito mas feliz.
¿Pero, que pasa con las personas que no han tenido esa suerte, es curiosidad, esa oportunidad de aprender esas enseñanzas?
Por mucha preparación, diploma, carreras que se pueda tener, hay ciertos patrones de conductas, aptitudes, sabidurías, modelos que no sabemos y que es de menester inculcar a modo de complemento profesional para evitar situaciones tal como leistes al principio del articulo y que suceden cada vez mas en la sociedad. Todos necesitamos de todos por mucho enemigo, amigo, conocido que se sea. Quiero seguir creyendo en la humanidad, en la bondad del ser humano.
Hoy aprendí 2 grandes lecciones:
1) Solo, jamas lograre mis sueños. Es el principio del fracaso.
2) Todo aquel comportamiento que te enoja, es porque que también lo padeces.
A pesar de haber escrito 3 libros, sigo aprendiendo ya que, sabre todas las pautas a seguir pero, el camino a la superación personal es constante, continua y esta época negra me sirvió para conocerme mejor.
Los pequeños como nosotros en este caso; el empresarial, necesitamos de ustedes, los grandes para ayudarnos a difundir unos valores, unas aptitudes así como sabidurías a las personas externamente a su profesión.
Gracias a tod@s vosotros.
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